Las normas sobre el porcentaje de vehículos eléctricos (EV) que las empresas de automóviles deben vender no se debilitarán, afirmó el secretario de Transporte, a pesar de la creciente presión de la industria.
El mandato se volverá más estricto el próximo año antes de una prohibición total de los automóviles nuevos diésel y de gasolina en 2035, pero los fabricantes de automóviles han sugerido que las reglas podrían amenazar los empleos.
Varios altos ministros del gobierno y fabricantes de automóviles con fábricas en el Reino Unido mantendrán conversaciones cruciales esta semana sobre el mandato de vehículos eléctricos y la caída de la demanda de automóviles.
Louise Haigh afirmó que examinará las “flexibilidades”, pero insistió en que “el mandato no se verá debilitado”.